La liposucción, succión de grasa o lipectomía de succión consiste en extraer depósitos de grasa no deseados de las áreas superficiales del cuerpo, incluyendo el mentón, el cuello y las mejillas; la parte superior de los brazos y la parte superior de los senos; el abdómen, los glúteos, las caderas, los muslos, las rodillas, las pantorrillas y los tobillos.
La liposucción no es un tratamiento de la obesidad, sino que está destinada a corregir aquellas regiones del cuerpo en las cuales persiste grasa acumulada rebelde a la dieta y al ejercicio.